Todos recordamos aún el fiasco que resultó ser la ley que reformó la regulación penal de los delitos contra la libertad sexual, que lejos de endurecer las penas, acabó reduciendo las de algunos de los delitos más graves, permitiendo la liberación de algo más de un centenar de presos.
Lo flagrante de dicho error es que se cometió pese a que todos los informes previos sobre el proyecto de la norma, y casi todos los foros de juristas, advertían de la contradicción entre el fin perseguido y las consecuencias previsibles de la norma.
Ahora, para que cualquier ciudadano de a pie nos entienda, está pasando exactamente lo mismo con la ley de 1/2025, de 2 de enero llm amado de “Eficiencia del Servicio Público de Justicia”, que dice buscar la mejora de la Justicia cuando en realidad: la denigra; dificulta su acceso, y la condena al colapso. Read More...